OTRO INTERMEDIO CULTURAL: PUES SI, ESTUVIMOS CON AMARAL

No hace falta darme muchas excusas par acudir a un sarao cultural, ni siquiera – a pesar de la fama que nos gastamos los colaboradores de prensa musical – es necesario prometernos un ágape de esos que te quitan de la cena. No, yo como mucho me tomé un vaso de agua, aunque tampoco había mucha mas opción, porque a las 13 horas es un poco raro tomarse algo mas fuerte, salvo el enésimo café del día o una cerveza.

La rueda de prensa fue una buena jugada de la gente del Festival Territorios Sevilla, en cuya edición 2012 (18 y 19 de Mayo) actuará la banda natural de Zaragoza, en realidad, ellos tocaban esa misma (19 de Enero) noche y la siguiente en la Sala Custom (antigua sala Q además de otros cuantos nombres y dueños anteriores), pero igual que un servidor aprovecha para entrevistar a rocosos rockeros cuando están de gira, el dúo tuvo a bien presentar las nuevas incorporaciones al cartel – como Cyan o Marina Gallardo – además de responder a nuestras preguntas.

¿Quien será ese apuesto engominado de ojos vidriosos? ¿Por qué Juan no sonríe? ¿De verdad no hay canapés?

Pero antes de que un servidor (¿quién si no? ¿acaso hay alguien con mas ganas de destacar?) abriera el turno de preguntas, Juan Antonio Pedrosa – director del festival – aprovechó para informarnos de la idiosincrasia del evento, incidiendo en que se trata de una iniciativa privada. Esto era algo que yo ya sabia, pero aún hoy me encuentro con mucha gente que piensa la contrario, es comprensible porque – como el propio Pedrosa explicó – en sus ediciones pasadas, el festival utilizó algunos espacios públicos de la ciudad para sus actividades paralelas o incluso actuaciones.

Dichas actividades se han ido perdiendo paulatinamente, algo que lamento sobre todo en el caso de las colaboraciones con el festival In-edit de Barcelona, porque practica un género del que soy fanático; los documentales sobre música. Ahora el festival es básicamente dos días de conciertos de una buena parte de lo mas granado del pop español y extranjero, con algunas miradas retro (si, Human League, me refiero a ti) pero que sirve para dar una buena sacudida al ambiente musical de Sevilla, que a veces da la impresión de engarzar conciertos interesantes uno tras otro y otras veces parece un desierto, encima abandonado.

Como es de esperar, el problema viene sobre todo por el “estrechamiento” propiciado por el clima económico, mas allá de cuestiones políticas (ya saben que en este blog hablamos de esas cosas lo mínimo y necesario) creo que cualquier consistorio debería dar todas las facilidades posibles a un evento de este tipo, sobre todo en las fechas (mediados de Mayo) que tiene programado celebrarse, cuando el turista medio descarta la capital hispalense en pos de una playa.

De igual forma, Don Juan Antonio incidió en la buena oferta que era el abono – 35 euros – y que ya el año pasado habían conseguido que al espectador le saliera “a euro el grupo”. Por supuesto, la pega es que las actuaciones no solían pasar de la media hora, lo cual está muy bien siempre y cuando no seas superfan de alguna de las bandas, pero... así es la vida.

Volviendo a los Amaral, decir que, efectivamente, con muy poquita promoción habían conseguido llenar dos noches la Custom, lo cual en estos tiempos que corren es una buena señal de la salud de un grupo aunque hace un par de años consiguieron agotar mucho mas papel en su concierto del Auditorio. ¿Precavidos? Solo un poco.

Mentiría si dijera que soy fan del grupo, pero escucho sus canciones en la radio, pongo sus álbumes por Spotify (y ya me tiene que gustar para que yo abra Spotify), veo sus conciertos en la televisión y me gusta. Aparte, tienen todo mi respeto, Amaral pertenece a ese extraño grupo del pop/rock nacional – como Dover, Sober y otros grupos que no tiene por qué rimar con Game Over – que han conseguido el éxito a base de mucho currar con una propuesta que no tiene por qué rebajarse al mínimo común divisor en las letras y la música pero tampoco tiene un universo tan particular e inaccesible como muchas bandas de culto.

Naturalmente, también tienen detractores, que creen que, a pesar de lanzar alguna referencia posmoderna en sus canciones, sus temas no les separan mucho del nivel lírico habitual de Amaia Montero, que consideran la configuración de grupo – el sesudo guitarrista en la sombra que es Juan Aguírre al lado de la cantante de personalidad explosiva que es Eva – como una imagen impostada. Ante esto, poco se puede decir, ya digo que han encontrado un buen equilibrio entre lo universal y lo propio, entre lo enérgico y lo pusilánime. Que se caigan a veces de un lado o del otro según el que esté escuchando es uno de los gajes del oficio.

Yo hice las dos primeras preguntas, empezando por el balance que hacía el grupo de su nueva independencia. Aquí Juan dio una respuesta bastante larga, en parte porque partía de la base de que yo no tenía muy claro el concepto de independencia, como casi todo eran medios generalistas, tampoco quise interrumpirle diciendo “si, entiendo que Virgin antes era de EMI y ahora la ha comprado Universal, etc...” En cualquier caso, aquí esta la rueda de prensa, por si, se han cansado de leer.

También les pregunté qué les parecía la separación de REM – Juan asistió a uno de los conciertos “Basicos” de los 40 que dio la banda – y nos estuvo contando las colaboraciones con Peter Buck (para dos temas de “Gato Negro – Dragón Rojo”) y lo elegante que consideraba su forma de haberse marchado... Hubiera sido otro buen momento para discrepar en voz alta, porque no creo que los rapeos de “Around the sun” (antepenúltimo disco) fuesen precisamente dignos. Pero ya digo que tampoco era plan de ponerse obtuso porque sí.

Después siguieron preguntas mas generales aunque nos descubrieron que incluso estando en el hotel , el guitarrista estaba dándole vueltas a algo de material para el disco que sucederá a “Hacia lo salvaje” y me sorprendió su reacción al ser preguntado por el tema SGAE: “¿lo de los chorizos quieres decir”? Alguien en “Meneame” consideró que la parte que se dedicó a hablar de Internet y su impacto – algo que parece casi de obligación en cada entrevista con músicos que se hace hoy día – era lo bastante interesante como para “relinkearla”, subiendo súbitamente las visitas a mi canal de Youtube, desde aquí, gracias.

Hubo un par de momentos graciosos que no sé si la cinta – si, yo todavía grabo en cinta porque me parece la mejor manera de guardar las cosas – llego a captar en toda su gloria: se nos coló el audio de un micrófono no identificado en la sala y después una de las respuestas de Aguirre volvió a sonar por los altavoces como si fuera un loop (me imagino que se estaba grabando el audio, o que este se estaba emitiendo desde alguna antena en la sala y volvió a colarse por el receptor de los inalambricos).

Mi última pregunta fue un poco típica; ¿como vivís una gira por salas trars haber hecho una de pabellones deportivos y auditorios? A mi me hubiera gustado una respuesta en plan Frank Zappa: “La cosa está muy mala, los ayuntamientos no tienen tanto dinero como antes para compensar los cachés así que hemos preferido apostar sobre seguro”. Pero claro, obtuve la que me merecía: “tenemos muchas ganas de retomar el contacto directo con el público”. Como si Eva hubiera pensado “respuesta típica a pregunta tópica”. Por cierto, Eva gana mucho en persona, por si pertenecen a ese colectivo que no tiene claro si lo suyo es una belleza “alternativa”, les digo que es realmente atractiva.

Tras hacerse las fotos de rigor y grabar los saludos correspondientes, Amaral abandonó la sala dejando, creo, un buen sabor de boca, saben tratar con la prensa, hablaron maravillas del público sevillano – reconociendo que los maños son un poco secos en comparación – y son muy bueno profesionales. Por lo visto triunfaron en sus dos bolos (se me pasó la fecha tanto de comprar entrada como de pedir acreditación, ¡ouch!), así que realmente poco que añadir, salvo que no les pase como a REM y sepan tomarse un descanso cuando deben, recargar las pilas creativas y seguir evolucionando, que salvo desastre inminente, la cosa promete.

Para la próxima, retomaremos el tema automovilístico a tope durante unos cuantos artículos para después volver con un post-mega-apocalíptico de un grupo musical, y no puedo decir mas... salvo Fleetwood Mac.